13.11.16

Por fin Aragón ya importa en el mundo católico. ¡¡Uff!!

Pocas cosas me han llenado tanto de emoción y alegría como este titular de El Periódico de Aragón. Existimos en Aragón —pues de no ser así ¡¡quiá, de qué!!— y se nos tiene por fin en consideración, se nos hace caso en Europa, por fin Aragón va por su fuero (en minúscula) a conquistar el mundo. Y eso está muy bien ¿no?.
El gran trabajo del cura de Mequinenza de nombre raro pues es polaco y sería lo menos importante en esta historia de Summer y Luis Carandell con toques de Gila, ha logrado que por fin en Aragón tengamos un montón de pelo de un Papa. Con dos cojones. El pelo de Papa es la hostia, y si encima va para santo es ya la repanocha. 

No queda claro cómo es posible que un cura joven lograra un mechón de pelo de un Papa auténtico como Juan Pablo II, aunque uno se puede poner a imaginar y llegar a la conclusión que los barberos de Europa están causando un gran mal a este mundo. 

Guardar los pelos cuando uno se arregla el flequillo es una putada de sibaritas, por no decir otra palabra. ¿Habrá gente que se coleccionará pelo de famosos y famosas?

Para más detalles, nos ha llegado a dejar la noticia que este joven profeta mientras profundizaba en sus estudios sacerdotales, llegó a la conclusión de que guardar el pelo del Papa era el culmen de su carrera. Y eso que todavía no podía intuir que terminararía en Mequinenza.

Yo me lo imagino con una cajita dorada acudiendo a casa de las viejecitas del pueblo aragonés a darles las emociones y la palabra religiosa, acompañado del pelo del Papa Juan Pablo II, y dejándolo oler, besar, tocar. Las agüelitas de Mequinenza se sentirán nuevas. 

Yo, os lo juro que lo miraría con calma desde la DGA, cerraría los Ambulatorios del Salud de Mequinenza, y con el pelo de Juan Pablo II que se fueran apañando. Nos íbamos a ahorrar una pasta gansa en medicina pastillera.

Lo cojonudo es que la parroquia de Mequinenza es la primera de entre todas las de Aragón que cuenta con una reliquia del llamado "Papa Polaco" y que esto ha motivado una presentación oficial a los fieles aragoneses, con una misa que este fin de semana realizará el arzobispo de Zaragoza, Vicente Jiménez. 

Tras el Ecce Homo de Borja nos viene ahora el pelo papal. Por fin estamos poniendo Aragón en el mapa turístico internacional.

Si alguno le apetece leer la noticia real, aquí puede y debe, será histórica.