15.4.11

Ágora, posiblemente para revitalizar la cultura en Zaragoza

Ayer Chunta Aragonesista presentó en la Escuela de Música de la calle Armas de Zaragoza, su proyecto cultural “Ágora” con el que espera revitalizar la cultura de nuestra ciudad, para entregar a los creadoras y creadores aragonesas posibilidades para desarrollar su trabajo, en un intento de que Zaragoza tenga una marca cultural reconocida y apreciada.
No voy a entrar a valorar este programa, pues ya será CHA quien nos vaya enseñando en qué consiste, sí decir que tras los muchos fracasos del actual grupo de gobierno PSOE+PAR en fiascos tristemente recordados por todos, Zaragoza se merece una calidad cultural muy distinta, un esfuerzo incluso en periodos de crisis económica, para dar valor a la cultura, que sea capaz de motivar a la sociedad en su crecimiento y en su puesta en valor.
El proyecto es tan sencillo como utilizar espacios que ya existen, que están vacíos y sin uso, dotarlos de las mínimas instalaciones posibles y cederlos para la creación artística, para el desarrollos de talleres, para mostrar a sus ciudadanos vecinos lo que se hace en el campo artístico contemporáneo. Se trata de dar vida a edificios parados, para llenarlos con las ideas que sean capaces de presentar l@ creadores culturales.
No se trata de hacer festejos sino de posibilitar que Zaragoza sea una ciudad con marca cultural propia, como ya sucede en todas las ciudades de más de 200.000 habitantes en España. Zaragoza no, todavía, y es culpa de todos nosotros que no sabemos exigir lo que ya disfrutan otras ciudades vecinas.
No se trata de insistir en fiascos de gran inversión y potente fracaso; se trata de dejar hacer, de posibilitar a las personas del Arte su trabajo, de mostrar a todos nosotros que Zaragoza SI puede. Más sabiendo que son muy numerosos los creadores zaragozanos y aragoneses que abandonan nuestras tierras por falta de apoyos básicos que si encuentran en los vecinos. Es un proyecto parecido al desarrollado en Madrid, llamado “El Matadero” (hay varios ejemplos más en diversas ciudades europeas, pero tal vez menos cercanos), para los que conozcan este intento madrileño de llenar de cultura, espacios que en apariencia nada tienen que ver con ella.
Por cierto, la exposición de Ágora muy completa e interesante, pero los canapés del final, servidos por los Talleres Ocupacionales de Las Fuentes, un encanto de sabor y presentación. Lo siento, pero estoy aquí para contar los detalles.